En Federico hacia Lorca, Miguel del Arco dirige a La Joven Compañía en un viaje hacia la juventud de un Lorca que se soñaba poeta.
Sinopsis
Los treinta y ocho años de Federico García Lorca están atravesados de vida, literatura y muerte. Tres ejes que nos guiarán en este viaje hacia aquel joven que se soñaba poeta y hacia el poeta que jamás dejó de ser joven.
Un camino habitado por los paisajes andaluces de su infancia y de su adolescencia, por el Madrid de la Residencia de Estudiantes o por el convulso Nueva York de fines de los años 20 hasta llegar, en un vil giro del destino, a las sombras siniestras de la noche y de la bala que lo atravesó.
Perdidos y libres, como el autor a la caza de imágenes con que llenar sus páginas, atravesaremos con él su vida y su obra, asomándonos al Lorca joven, vivo, y también al Lorca amigo, al excesivo, al viajero, al amante de la piel y de las palabras. Al poeta capaz de hacernos respirar en sus versos la luz y la sangre, la carne y el amor. Al hombre y, sobre todo, al joven cuya voz sigue resonando, vibrante y lúcida, más allá de la miseria de la Historia