Explorar los miedos e inseguridades de la masculinidad actual a través de tres arquetipos muy definidos y reconocibles es una base de partida muy válida para hacer una comedia. Es más, el cine y la televisión se han encargado de explotarlo hasta la saciedad en los últimos tiempos. Buscar que sea original se convierte por tanto en una misión complicada, por mucho que la trama se haga transcurrir en el barrio madrileño de Carabanchel y en un centro tántrico que, en estos tiempos, pienso que no sufriría tanto rechazo por intolerancia como pretenden hacernos creer en la obra. Carabanchel no es tan rancio, igual tendría más problemas en el barrio de Salamanca. Pero si lo que se pretende es obtener […]